A pesar de perder el referéndum del pasado mes de
septiembre, el soberanismo escocés ha vivido desde entonces un gran
crecimiento. Según explicó
Christina MacKelvie, diputada en el parlamento de Escocia, a la Universitat Catalana d'Estiu (UCE), la militancia del SNP se multiplicó por cinco en pocos días después de la derrota en las
urnas y logró una victoria muy clara en las últimas elecciones al parlamento de
Westminster con 56 de los 59 escaños. Es por ello que el SNP se prepara para
convocar un segundo referéndum "independientemente de si Londres está de
acuerdo o no". "Hace un año, mucha gente votó 'no' a cambio de más
autogobierno y ahora hay que votar 'sí' dado que las promesas se han
esfumado", dijo.
La primera prueba de fuego para medir las posibilidades de
éxito en un nuevo referéndum serán las elecciones escocesas del mes de mayo del
año próximo. De momento las últimas encuestas pronostican
que el SNP conseguiría 79 diputados de los 129 de la cámara, unos resultados
"extraordinarios" que supondrían superar holgadamente los 65 escaños
que tienen actualmente.
Tal y como afirmó la diputada, "la gente está muy
enfadada porque las promesas de Londres no se han cumplido". Con todo,
McKelvie quiso dejar claro que descartan una Declaración Unilateral de
Independencia (DUE) para conseguir la independencia. "Hay que pasar por un
referéndum ya que es fundamental mantener los compromisos adquiridos y también
los principios de las Naciones Unidas y los tratados internacionales", puntualizó.
Por último, McKelvie también explicó que el resultado del
futuro referéndum que se realizará en el Reino Unido antes del 2017 en torno a
su permanencia en la UE podría precipitar la convocatoria de un segundo
referéndum en Escocia. Así pues, quiso dejar claro que serán cautelosos a la
hora de escoger la fecha de la nueva consulta "ya que esta vez hay que
ganar".